Brevisima Reseña
"Soy un hombre viejo y cansado. Pero he matado a este pez que es mi hermano y ahora tengo que terminar la faena -dijo-. Sujetó al pez era como amarrar un bote mucho más grande al costado del suyo.
El tiburón no era un accidente. Había surgido de la profundidad cuando la nube oscura de la sangre se había dispersado en el mar a una milla de profundidad. Había surgido tan rápidamente y tan sin cuidado que rompió la superficie del agua azul. Cuando el viejo lo vio venir se dio cuenta de que era un tiburón que no tenía ningún miedo y que haría exactamente lo que quisiera. El viejo tenía ahora la cabeza despejada y estaba lleno de decisión, pero no abrigaba mucha esperanza. "El hombre no está hecho para la derrota -dijo-. Un hombre puede ser destruido, pero no derrotado".
El tiburón no era un accidente. Había surgido de la profundidad cuando la nube oscura de la sangre se había dispersado en el mar a una milla de profundidad. Había surgido tan rápidamente y tan sin cuidado que rompió la superficie del agua azul. Cuando el viejo lo vio venir se dio cuenta de que era un tiburón que no tenía ningún miedo y que haría exactamente lo que quisiera. El viejo tenía ahora la cabeza despejada y estaba lleno de decisión, pero no abrigaba mucha esperanza. "El hombre no está hecho para la derrota -dijo-. Un hombre puede ser destruido, pero no derrotado".
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario